Con el objetivo de invitarnos a “explorar el mundo de la felicidad como un estilo de vida, que es aplicable en nuestro diario vivir y cómo impactar en nuestro entorno más cercano”, la coach organizacional y gestión de cambio, Loreto Venegas, convocó a 80 Monitoras, Asistentes y Directiva de ANSPAC a tres jornadas para reflexionar acerca de la felicidad, planteándonos las preguntas: ¿se puede ser feliz?, ¿qué determina la felicidad? y ¿cómo vivo yo mi felicidad? Nos habló que la felicidad es un estado de ánimo producto de la actitud elegida por nosotros, y derrumbó varios mitos y lo que significa tener expectativas no realistas sobre lo que nos hará felices.
En el segundo taller, Loreto nos entregó tres formas en que las estrategias para ser feliz pueden ser las “adecuadas”: analizar lo que hay por debajo de nuestra propia infelicidad, reconocer nuestras virtudes, nuestros talentos o nuestros objetivos, y reflexionar hasta qué punto las actividades que elegimos se pueden adaptar a nuestro estilo de vida.
Partimos el tercer taller viendo un video sobre ¿Qué es la felicidad? y luego nos dio varios tips para tener en cuenta para ser felices: la importancia fortalecer la confianza en nosotros mismos, poner atención a nuestra mirada y a nuestro diálogo interno, afrontar nuestro subconsciente, evitar pensar demasiado, practicar la gratitud, reconocer las actividades que nos causan felicidad, cultivar el optimismo, practicar la amabilidad, cuidar las relaciones sociales, desarrollar estrategias para enfrentar situaciones o problemas, aprender a perdonar, ¡y muchos más!
Resumió las cinco claves para ser feliz en: “Emociones positivas”, “El momento más oportuno y la variedad”, “El apoyo social”, “Motivación, esfuerzo y compromiso”, y “El hábito”.
Terminamos el ciclo de talleres, cantando “Resistiré”, del Dúo Dinámico, en que muchas de las participantes se animaron a abrir los micrófonos y unirse al coro de voces. Nuestros más sinceros agradecimientos a Loreto, después de cada sesión, nos fuimos con el corazón llenito y estamos convencidos que ¡más felices!
